jueves, 20 de septiembre de 2007
Mi ma y yo tenemos mil cosas diferentes y creo que si en algunas nos parecemos nos sobrarían dedos en las manos para contarlas.
Una de esas cosas es que mi mamá tiene una extraña fobia por los cuchillos mientras que yo ¡Los amo!.
Entre la lista de cosas que realmente odio en la vida estan los cuchillos sin filo. Agghhh, son la cosa mas detestosa que me puede pasar en la cocina.
Siempre me ha gustado cocinar, desde niña. Pero la mayoria de veces lo hacía con mi abue, en su casa. Esa es otra de las cosas que mi ma y yo no tenemos en común, que cocinar no esta entre sus cosas predilectas, asi que en mi casa había alguien que cocinaba.
Asi que yo me iba a veces donde mi abue y la ayudaba a preparar el almuerzo y la verdad lo disfrutaba muchisimo.
Mi abuelito siempre se encargaba de mantener los cuchillos afilados por que el tampoco soportaba un cuchillo que no lo estuviera.
A veces le decia a mi ma que yo queria cocinar algo y lo hacía, pero era toda una tortura, en serio.
En mi casa no habia un solo cuchillo de verdad. Todos parecian de juguete y los que se miraban "cuchillos serios" pues... creo que tenian mas filo mis uñas. Así que tenía que ir a la casa de mi abue a traer uno de los de ella, ante la horrorizada mirada de mi ma que sentia que me cortaba el dedo entero, cosa que nunca pasó, aunque claro, a veces uno no se salva de una cortadita, pero era preferible a tener que cortar un tomate casi que despedazado con las manos y al borde de la desesperación, y ni hablar de la carne.
Ahora yo tengo mi propia cocina, pero mi ma sigue "cuchillofobica" y de pronto yo busco mi cuchillote y no lo encuentro.
Busco por todas partes y me doy cuenta de que mis mas afilados cuchillos han desaparecido y solo me quedan los mas inofensivos.
Entonces echando chispas voy a investigar con la principal sospechosa cual fue el paradero de mis cuchillos que yo acababa de dejar en una gaveta, y claro!! ella ya me los ha escondido.
Casi al borde de la tortura la hago confesar donde los puso (bueno, no tanto, solo exagero un poco) y me lo dice.
Voy a buscarlos al escondite y allí estan, los encuentro bajo capas y capas de papel periodico y cartulina, y encima de todo enrollados con cinta adhesiva.
Y tengo que sacar a esas especies de momias afiladas de su sarcofago y pedirle a mi mama que deje mis cuchillos en paz, por que no le estan haciendo ningun daño.
Ella me suelta el sermón de que son peligrosisimos y que las nenas se pueden cortar, etc. etc. etc. (lo mismo que me decia cuando yo era adolescente y queria usarlos)
Pero en realidad mis hijas no agarran mis cuchillos, y cuando cocinan algo lo hacen conmigo, o solas pero bajo mi vigilancia.
En fin, mi mama que siga con su cocina llena de cuchillos de juguete y yo conservaré en la mia mis "armas letales" (agghh)
Creo que es consecuencia del trauma que me creo la falta de ellos en mi casa cuando fui niña (debere ir a terapia por tu culpa, ji ji)
A mi me gustan, vaya!!
1) Que Lizeth no sabe cocinar (que verguenza).
2) Que Silvia de niña querìa ser carnicera.
3) Que entiendo a Lizeth.. Silvita con un cuchillo en la mano puede ser muuuuyyy peligrosa...
Ja, ja, ! Realmente me han hecho reir! Les mando un fuerte abrazo a las dos.
... Espero que no se te ocurra ir a un circo a trabajar de lanza cuchillos.. Ja ja ja!
Dice mi ma que es la pura verdad, que vergüenza pero no sabe cocinar y que sus comidas son tan originales que solo se prueban una vez en la vida (por que se las inventa en ese instante y luego olvida como lo hizo)
Y yo si queria ser carnicera!!!!
Me encantaba ir a la carniceria y ver como cortaban la carne, como se deslizaba como margarina con el filo de aquellos cuchillototes, y me encantaba ver cuando los afilaban. Luego en casa, habia una montaña de piedras como de río, no se por que, pero a veces por las tardes me salia yo solita o con mi prima a jugar de carniceria y que las piedras eran la carne... ahh que buenos tiempos.
- la hija no obedece y no sabe cocinar jajajja
- pues caracteres obligaciones madre manda - hija obedece:
.Paz y amor, solo el amor las igualara, el amor de dios es el remedio de tanta diferencia.
- conversen y al final las afiladas diferencias no seran afiladas si no de madera fina y pulidas.
Muchos abrazos y muchas Bendicones a ambas chau chau y chau
Saludois
comprenderas con tus hijas madre de dos hijas, la relación entre una madre y una hija es más conflictiva que la que la misma tiene con su padre o la que el hijo con la progenitora. MUCHAS BENDICIONES
Por otro lado, pues si tampoco se les va a dar cuchillos a jugar...
Gracias Silvita por el premio, ha sido el mas lindo que he recibido.